Nunca lo sabrás hasta que no lo hayas vivido.

…Y entonces comprendí, comprendí un montón de cosas, cosas que nunca antes podría haber llegado a entender, y todo ello se resumía en una sola frase: “Nunca lo sabrás hasta que no lo hayas vivido”.

Y así es, hoy en día se habla tanto y se opina tanto sobre todo, y la mayoría de las veces esas opiniones y habladuría no tienen ninguna base sólida ya que sólo son eso opiniones, opiniones  muy lejos de la realidad. Es más uno mismo puede tener una opinión acerca de cualquier cosa,  la cual puede verse alterada por circunstancias o situaciones que pasen o cambien en tu vida.

Es tan fácil opinar cuando no has vivido o sentido tal situación en tu propia piel.